Tardes de verano, tardes en un banco, tardes que te da por pensar y otras que en cambio desearías no hacerlo, tardes en las que el tiempo pasa y otras en las que te aferras al pasado , tardes de risas y sonrisas, tardes pensando en ti y otras deseando no haberte conocido, de esas pocas, a ser sincera.
Tardes tranquilas, hablando contigo, noches de ilusión , llena de palabras que me daban esperanzas , noches dando vueltas en la cama , pensando , mejor dicho soñando , que algún día me encontraré envuelta en tus brazos.
Son simples noches de un gran soñadora con ilusiones que se desvanecen con el paso del tiempo, cuando sus palabras se convierten en grandes caramelos que regalar a mis oídos quieren. Noches en vilo , esperando una simple respuesta tuya , una respuesta que al menos no es la deseada.
Mañanas , tardes y noches, sobre todo noches, noches que no son como las de hace un tiempo, hoy a diferencia de hace tiempo no das señales de vida y en cambio sigues vivo.
Supuse que sería un verano inolvidable llenos de mil y un recuerdos que con el tiempo sería bonitos recordar, supuse que la gran plataforma de los tacones no rizaría si quiera el felpudo que ante la puerta de casa se encuentra, supuse que sufriría un pequeño amor de verano, supuse muchas cosas que finalmente no se han llevado a cabo; El tiempo pasa y no espera a nadie, o dejas de aferrarte a el o te quedas estancada esperando algo que lo más probable nunca llegue, ya no me limito a decir : Supongo que estoy aferrada a él, ahora lo afirmo.
Dulces palabras, que daban a lugar a planes previstos , con esperanza de ser cumplidos. Ambas nos mirábamos deseosas de ese " Gran Verano" que a la vuelta de la esquina se veía.
Pocas hora quedan para que este acabe, y aún ese Gran verano, no ha dado señales de vida, por así decirlo.
Vuelvo atrás.
Quizá ese gran verano no ha llegado , pero tu puedes modificar el destino y ni has alzado un dedo para hacerlo, aferrada al tiempo , eso es.
De un día a otro , de un momento a otro , todo perdió su encanto. La culpable tu coraza , por así llamarlo , la que te impide ser como eres , cuando quieres y puedes , simplemente en numerosas ocasiones , se encarga de estorbar. Quizás esa coraza tenga nombre , y se llame Miedo .
Despierta me y sácame de aquí , por favor.
Exhalas gran suspiro.
Te encuentras tumbada encima de una toalla muy colorida llena de recuerdos , esta está práctica mente cubierta de arena , tanto que incluso tus pies rozan la ardiente arena , quema , pero no duele , puedes aguantarlo, ya se pasará. Pequeñas brisas de un aire cálido revuelven tu melena rubia , que con el paso del tiempo ha ido oscureciéndose. Inspiras una gran cantidad de aire por tu pequeña nariz que está cubierta de crema para que no se queme , porque dicen "que el aire quema" algo que nunca has llegado a entender , pero esa es otra historia.
Intentas retener lo máximo posible ese aire que va acompañado de un ligero olor mar , con el único fin de no olvidar jamás ese maravilloso olor que te aporta una sensación de tranquilidad.
No puedes más y vuelves a exhalar , pero lo haces despacio.
Hace una calor horrible a pesar de las pequeñas brisas cálidas que de vez en cuando corren.
Te alzas de la toalla , y lo ves , ahí esta , un gran mar con alguna que otra gran ola que finalmente llega a su destino, la orilla , donde deposita alguna que otra concha , para más tarde volver de donde vino.
Te diriges hacia él , sientes como tus pies rozan ese agua que al principio resulta estar más bien fría , pero finalmente te acabas acostumbrando, tanto que llegas a adentrare hasta el fondo e incluso alguna que otra ola llega a sumergirte. Pero terminas saliendo.
Acabas de recordarlo todo, supones que serán casualidades de la vida , puesto que un día te hundiste y con el paso del tiempo saliste de allí. No quieres recordarlo más, de repente una gran ola te azota la espalda meneando tu cuerpo, pero no te hundes , esta vez ya no lo haces , decides salirte del agua y lo haces nadando , ahora tu único destino es llegar a la orilla.
Piensas; ¿Qué paradoja no? hasta entonces tu vida había estado llena de olas que te sumergían hasta que con el paso del tiempo llegaste a esa orilla tan deseada. Esbozas una sonrisa.
Ahora mismo estás pisando esa orilla y lo haces con más fuerza que nunca , tu huella se ha quedado allí señalada. Tu pasado se ha quedado flotando tras esa gran ola que te golpeó , ahora se lo lleva la marea , ya no queda nada , cada vez está más lejos de ti , se sumerge , hasta nunca...
