.

.
En todos los momentos de mi vida he mostrado una sonrisa, este no iba a ser diferente...

jueves, 4 de octubre de 2012

Déjate besar, y besa tú después que siempre en los labios el amor perdura.


Los soles pueden salir y ponerse;
nosotros, tan pronto acabe nuestra efímera vida,
tendremos que dormir una noche sin fin.
Dame mil besos, después cien,
luego otros mil, luego otros cien,
después hasta dos mil, después otra vez cien;
luego, cuando lleguemos a muchos miles,
perderemos la cuenta para ignorarla
y para que ningún malvado pueda dañarnos,
cuando se entere del total de nuestros besos.

[Catulo]